Introduce algunas palabras relacionadas con tu negocio para empezar.
Cómo crear un nombre memorable para negocios:
Para que sea memorable, el nombre de tu empresa debe transmitir el sentimiento de la marca, su misión y valores, insinuar la historia detrás de por qué comenzó este negocio, y resonar en tu público objetivo. Hemos elaborado una guía paso a paso fácil de seguir para ayudarte a crear un nombre comercial memorable.
Considera lo que hace que tu negocio sea único.
Escribe una descripción de tu negocio.
Debes poder escribir una descripción clara y concisa de tu negocio y el tipo de productos o servicios que ofreces. Esto puede sonar muy simple al principio, pero la gente tiende a sobreexplicar y complicar sus respuestas. Cuanto más específico seas, mejor.
Considera también a tu público objetivo y escribe una descripción de ellos. Usa tu plan de negocios para ayudarte.
Cuenta tu historia.
La razón por la que iniciaste tu negocio puede proporcionar una valiosa inspiración para el nombre de tu empresa. Considera también lo que haces de forma diferente y los productos o servicios que brindas, y anota los puntos clave.
Recomendamos hacer preguntas específicas, como:
- ¿Por qué decidí abrir una cafetería en lugar de un bar?
- ¿Por qué elegí producir uniformes para empresas en lugar de escuelas?
- ¿Por qué elegí ofrecer servicios de contabilidad a particulares en lugar de a empresas?
Escribe algunos rasgos de carácter para tu negocio.
Habla con amigos, familiares y colegas que conozcan tu idea de negocio, y pídeles que escriban algunas características y adjetivos que les vienen a la mente cuando piensan en tu empresa. Esto puede ayudarte a tener una idea de lo que te gustaría que transmita el nombre de tu compañía.
Una vez que tengas una lista de rasgos de carácter, crea una sublista de sinónimos y palabras relacionadas para cada rasgo.
Sé creativo.
Ten una lista de los nombres de tu competencia a la mano.
Querrás asegurarte de que tu nombre sea único, llamativo y memorable, así que ten a la mano una lista de los nombres de tus competidores. Esto también te ayudará a evitar nombres que suenen demasiado similares.
Ten en cuenta lo que hace a un buen nombre.
Un nombre memorable para negocios evocará un sentimiento o una imagen relacionada con la marca. Por lo general, tiene su origen en algo familiar, ya que eso hace que sea más fácil de recordar para las personas, o puede evocar una imagen para ayudar a nuestro cerebro a hacer asociaciones.
Idealmente, debería conmover a la gente y provocar una reacción, ya sea felicidad, risa o nostalgia.
Un buen nombre para empresas también abarcará el tema de la empresa para que tenga poder de permanencia para el futuro, incluso si el negocio se expande para incluir otros productos o servicios.
Comienza a pensar en nombres.
Usando las listas que has creado, ahora puedes comenzar a pensar en nombres. Prueba ideas que evoquen un sentimiento o una imagen relacionada con tu marca. También puedes tomar las palabras clave y procesarlas usando un generador de nombres.
Una vez que comiences, pronto te darás cuenta de lo fácil que será escribir nombres interesantes e intrigantes y, sobre todo, que aludan a la experiencia que tendrán tus clientes, cuenten una historia y evoquen sentimientos.
Es una buena idea tener algunas restricciones creativas, como apegarse a palabras que no tengan más de dos sílabas, o tratar de encontrar palabras aliteradas. Esto te mantendrá enfocado para que no tengas una lista demasiado larga para elegir.
Nombra a tu negocio.
Revisa los nombres que se te han ocurrido.
Repasa tu lista de posibles nombres y considera lo siguiente:
- ¿Suena bien o es divertido decirlo?
- ¿Se ve bien cuando está escrito?
- ¿Es fácil de deletrear y pronunciar?
- ¿Describe a mi negocio?
- ¿Es sencillo?
- ¿Es similar a alguno de mis competidores?
- ¿Funcionará si amplío mi negocio?
- ¿Funciona bien como nombre de dominio?
- ¿Está disponible el nombre de dominio coincidente?
Mira cómo se ven los nombres en diferentes medios. Esboza un logo o logotipo, pronuncia el nombre en voz alta, escríbelo en un correo electrónico. Al hacer realidad las ideas de nombres, obtendrás una mejor idea de lo que funciona y si se conecta con tu marca.
Prueba tu nombre con clientes potenciales.
Deberías haber reducido un poco tu lista en el paso anterior. Ahora, reúne a un grupo de enfoque y muéstrales tu lista corta de posibles nombres comerciales. Pídeles que pronuncien los nombres y pregúntales qué significan para ellos.
Vuelve después de uno o dos días y ve qué nombres recuerda la gente.
Comprueba si hay significados extraños.
Cuando creas un nombre comercial, existe la posibilidad de que tenga un significado extraño o inapropiado en otro idioma. Realiza una búsqueda en Google para verificar si hay algún problema de este tipo.
Presta atención a la jerga en diccionarios especializados para términos y frases de distintos idiomas cuando busques en los resultados de Google.
Verifica la viabilidad legal.
Ahora deberías tener una lista muy corta de nombres potenciales. Querrás hacer una búsqueda de marca y nombre comercial en cada opción, para asegurarte de que esté legalmente disponible.
Si todos los nombres preseleccionados están disponibles, elige tu favorito. Si no es así, simplemente puedes volver a tu lista más larga y tal vez probar un grupo de enfoque diferente.
Cosas a considerar:
1. La diferencia entre un nombre y una marca.
Tu marca es una serie de elementos: la misión y visión de la empresa, la paleta de colores, la tipografía, el logo, la voz de la compañía y la estrategia de marketing, entre otras cosas. En otras palabras, es la personalidad del negocio y cómo se presenta. El nombre debe transmitir tu marca en un título sencillo.
2. Todo nombre memorable se compone de dos partes.
La historia es lo que conectará emocionalmente con tu audiencia y el mensaje que quieres transmitir como marca. La estrategia es sopesar los aspectos tangibles de un nombre, como la disponibilidad legal.
Un gran nombre comercial equilibra estos dos aspectos: si le das más peso a la estrategia, por ejemplo, tus clientes solo se conectarán con tu nombre en un nivel racional y no crearán una conexión emocional con tu negocio. Por lo tanto, evalúa tus opciones desde ambas perspectivas, no solo si suenan "correctas" o "incorrectas".
3. Tu nombre debe estar preparado para el futuro.
Un error común es nombrar a la empresa con base en el producto o servicio que proporcionas. Si en el futuro deseas expandirte a otros productos o servicios, entonces tu nombre ya no será viable y es posible que debas pasar por el largo y difícil proceso de cambio de marca, arriesgándote a perder clientes y memorabilidad.
4. Tu nombre debe estar legalmente disponible.
No elijas el nombre de tu empresa antes de verificar las marcas comerciales, los nombres comerciales registrados, los nombres de dominio relacionados y el uso de las redes sociales. Querrás poder usar el nombre de tu empresa de forma constante en todos los contextos, así que asegúrate de investigar antes de elegir un nombre comercial.
5. Las ideas preconcebidas pueden desalentar la creatividad.
Deja de lado cualquier expectativa que tengas sobre el posible nombre de tu negocio, eso podría restarte creatividad. Debes evaluar un posible nombre comercial en función de su potencial y no en función de tus preferencias personales, ya que el nombre probablemente será más memorable para tu audiencia.
6. Debes amar el nombre de tu negocio elegido.
Asegúrate de que el nombre que elijas sea uno que te encante. Para hacer esto, tómate el tiempo necesario para seguir nuestros pasos, haz una lluvia de ideas, y piénsalo para que puedas encontrar un nombre que te haga sentir seguro de usarlo.
Cómo registrar un nombre comercial
